Al final cinco amigos nos juntamos para hacer esta rutita, ya que Merche amaneció griposa y se quedó en tierra y David Navarrete no apareció. Mañana estupenda de temperatura y los pinares están de dulce con las lluvias caídas días atrás. De mutuo acuerdo, o sea porque lo dije yo, decidimos cambiar el trazado para coger algunos senderitos guapos de la zona y como la cosa iba bien, pues seguimos enlazando uno tras otro para diversión del personal. Al pasar por el bar del camping de Aznalcázar nos paramos a tomar unas cervecitas y unas tapitas para recuperar fuerzas. Después rápidamente de vuelta a la Cañada de los Pájaros. Como veíamos que todavía no estábamos del todo recuperados, pues nos fuimos a comer a una tasca de La Puebla. Os dejo unas fotitos de la ruta. De las tapitas no, que luego os metéis conmigo.
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