Esta mañana al amanecer partimos desde Sevilla hacia el embalse de Los Melonares cinco de los inscritos en esta ruta, parando para desayunar en el bar de los Cazadores de Cantillana. En el punto de inicio de la ruta nos encontramos posteriormente con Julio y seguidamente con Antonio, que consiguió llegar después de hacer un poco de turismo provincial "gracias" a su GPS.
Esta ruta comienza con unos kilómetros de llaneo con sube y baja suave para calentar las piernas. Poco después, tras la foto de rigor en el puente del embalse, acometimos la subida a la cuesta de UPA, que era el tramo más exigente de la ruta. Con esta subida empieza lo más bonito en cuanto al paisaje que nuestra "primera primavera", que es como yo llamo a nuestro otoño, nos brinda por estas fechas después de las primeras lluvias.
Una vez arriba el camino no deja de ser un sube y baja suave hasta llegar a las proximidades de El Pedroso. Sin llegar a entrar en el pueblo, abandonamos la pista forestal para tomar un single track, como llaman ahora los cursis, que no es más que un sendero de toda la vida. Precioso este tramo de dehesa alfombrado de hierba por donde nos acompañaron al trote espléndidos ejemplares de cerdos ibéricos, tan grandes que se confundían con las redondas rocas de granito de la zona.
Paso fácil del arroyo para entrar a la finca de Las Jarillas por la perrera. Para no cruzar por delante del cortijo dimos un rodeo, que francamente es más bonito y recomendable que el camino recto que lleva al inicio de la gozada de bajada hacia el pantano de nuevo. En mitad de la bajada hicimos la parada acostumbrada en la torre de vigilancia para admirar el paisaje y hacernos unas fotos. Continuamos la bajada que termina justo en los coches y final del primer tiempo de la ruta.
El segundo tiempo de nuevo en el bar de los Cazadores para tomar un refrigerio y unas tapitas.
Ahora vendrán las fotos. Gracias a todos y hasta la próxima. Saludos. Juan Alcala.
No hay comentarios:
Publicar un comentario